Se inició desde muy temprana edad en el sector avícola por una tradición familiar y actualmente se desempeña como presidenta de una de las empresas más reconoci­das del sector. Blanca Ceup­pens destaca que el trabajo duro y la búsqueda constante son las bases para que una firma o emprendimiento lle­gue al éxito.

–¿Cómo se inició en el sec­tor avícola?

–Mis padres fueron los pio­neros en la industria avícola paraguaya. Ambos, siendo solteros, se dedicaban a la cría de aves, así se conocie­ron y juntos trabajaron con mucho esfuerzo y dedicación para formar lo que es hoy Granja Avícola La Blanca.

Nací en Capiatá, en donde inicialmente estaban las granjas y las plantas de balanceados y procesa­miento. Mis padres siempre compartieron su vida labo­ral en la casa, siendo ejem­plos para sus hijos y colabo­radores de perseverancia, honestidad y compromiso. Cuando culminé los estudios secundarios, me incorporé a la empresa de una forma natural y espontánea.

–¿Hay alguna anécdota que le marcó en su vida profesional?

–En más de 30 años traba­jando, las anécdotas son muchísimas y tengo muchos recuerdos. Los momen­tos más fuertes vividos nos marcaron: como el incen­dio que dejó fuera de servi­cio la planta de alimentos balanceados, un tornado con devastación en una granja y la crisis económica y finan­ciera del 2000. Pero todas estas experiencias que nos marcan hicieron que nos consolidemos aún más.

Así también, el trabajo nos recompensa con la satisfac­ción de ofrecer actualmente empleo a más de 1.800 perso­nas, formando parte de un gran equipo y siendo nuestra empresa reconocida como la marca ganadora de los pre­mios Top of Mind, Ranking de Marcas y Empresa Expor­tadora. Y sobre todo gratifi­cante que para el paraguayo la marca Pechugón sea sinó­nimo de pollo.

–¿Cuáles son los valores que fomenta desde su acti­vidad laboral?

–Mi compromiso más impor­tante es que la empresa siga creciendo y evolucionando, siempre manteniendo los principios éticos y los valores que los fundadores pregona­ron: integridad, humildad, responsabilidad y compro­miso. Compromiso con la calidad de los productos para los consumidores y con los trabajadores para mantener los puestos de trabajo. Con nuestro país en crear pues­tos de trabajo y con el gremio avícola apegados a la ética y al bien común del rubro.

–¿A qué factores atribuye las claves del éxito?

–Al trabajo duro y continuo buscando la excelencia. En la empresa evolucionamos constantemente aprove­chando los avances en pro­ducción y procesamiento. Y con el conocimiento del mer­cado innovamos productos, según el requerimiento del consumidor, consolidando cada vez más la marca Pechugón.

–¿Qué valores son fun­damentales para el lide­razgo de una empresa?

–La responsabilidad e inte­gridad. Ante el consumidor, la calidad y seguridad de que producimos un producto saludable y con las certifi­caciones nacionales e inter­nacionales más exigentes y la confianza del servicio que damos. El compromiso ante los colaboradores que cui­damos y capacitamos para su desarrollo, fomentando el trabajo en equipo. La serie­dad y cumplimiento ante los compromisos asumidos con los proveedores y clientes. También el compromiso con la sociedad y el rubro.

SECTOR AVÍCOLA

–¿Cuál es la coyuntura del sector avícola?

–El sector avícola en Para­guay viene en continuo cre­cimiento. El consumo de pollo aumenta por la prefe­rencia del consumidor bus­cando una carne económica, liviana y saludable. Aun­que este año el consumo se ve muy disminuido por el contrabando, los precios de la carne vacuna y falta de poder adquisitivo.

–¿Qué proyecciones tie­nen?

–Aumentar la produc­ción, abastecer el mercado, seguir ampliando la línea de productos, dar a conocer la mayor variedad de produc­tos de pollo que estamos ofre­ciendo para comodidad del consumidor.

–¿Cuál es la participación e importancia del sector en la economía nacional?

–El sector transforma 250 mil toneladas de maíz y 130 toneladas de soja en carne de pollo. Produciendo así 160 mil toneladas de carne anual. Lo que abastece con más de 23 kilos de pollo por habitante paraguayo.

–¿Qué fortalezas y debili­dades se pueden destacar del sector avícola?

–La fortaleza principal del sector es que la materia prima (maíz y soja) se pro­duce en nuestro país y es de excelente calidad. Además, los productores naciona­les abastecemos el 100% del mercado formal y todos tene­mos capacidad ociosa para seguir creciendo.

Una debilidad importante es la competencia desleal por partida doble de productos que ingresan masivamente de contrabando. Podríamos pro­ducir mucho más, que daría empleo a paraguayos y apor­taría más impuestos. A nivel interno también hay compe­tencia desleal de productores, que queriendo diferenciarse de las demás marcas hacen publicidad confundiendo y engañando al consumidor. Otra debilidad es el sobre­costo de flete que tienen los productos al exportar en rela­ción a otros países.

–¿Las exportaciones vie­nen creciendo en los últi­mos años, cuál es el factor impulsor y cuáles son las proyecciones?

–Las exportaciones crecen en volumen y con una mejora en precios. Hacemos cono­cer la calidad del producto avícola paraguayo, cada vez es más demandado. Inver­timos y capacitamos para adecuarnos a las exigencias sanitarias. Esperamos seguir aumentando el volumen, habilitando nuevos desti­nos y variedad de productos.